jueves, 25 de febrero de 2016

Poemas de amor cuando ya no lo esperaba

ESPERO TUS E-MAILS


Dame la palma de tus piés 
y te escribiré 
quue no dejes de escribirme nunca .

Que aunque barcas no haya 
desde tu puerta a la mía ,
vengas sobre murciélagos voladores 
que son adictos a mi terraza.
Y se posan en ella .

Y aunque navidad no sea 
te tendré preparado 
un plato de turrón y nueces.
Y el pañuelo rojo aquél 
para que te dé suerte .
Y vuelvas. 

No hagas mal a nadie ,
pero si has de pisar las hojas caídas 
y romperlas ,
no me importará ,
huidiza de los otoños soy .
Con tal que llegues con tiempo 
de quitarles los bichos 
a las amapolas .
Y poner las velas en la mesa .

Aunque te equivoques 
y éstas sean las de difuntos. 










DE UN DÍA DE FINALES DE OCTUBRE QUE SALISTE AL CAMPO


Verte partiendo almendras .........
Mientras los rayos de sol 
van dorando tu sonrisa 
y tu pelo.

Porque tu pelo nunca se ha de poner blanco.
 Ni tus palabras. Siempre densas .

Verte partiendo almendras.....
En sofá del salón,
que es negro. Pero tiene mariposas. 

¡ Que los años pasen 
y los almendros florezcan !

Solo quiero verte partiendo almendras. 

Tal vez yo te grite 
por si acaso me rompes la madera .
Tú has de seguir impávido ,
machacando ,
con esa imágen tuya 
tan serena . 

Mis nervios....Tu paciencia . 

O tal vez me invada, Dios no lo quiera , 
la amargura de las almendras, 
que no salen buenas . 







MIRARNOS


Está callada la noche 
y yo estoy no sé dónde .
Todavía no estoy segura 
¿Puede ser ?

¿Que después de tantos años ,
como por arte y gracia 
de un terremoto ,
entre las grietas de la tierra ,
hayan ido a parar 
tu cuerpo y el mío ,
a un mismo tiempo ,
a un mismo quererse abrazar ?

Yo no sé bien dónde estoy 
y la noche se asoma 
como queríendome asustar .

Yo siempre soy valiente ,
pero hay un pensamiento 
que me asalta constantemente  
y es tú llegando desde lejos 
y entonces ,
toda mi alma se empieza a calmar ,
toda la fiebre se vuelve brisa 
y cuando nos encontramos a un paso ,
nos quedamos con sonrisa leve ,
fijos y parados , 
horas, 
sin dejarnos de mirar ,

¿Será verdad ?

Que como por arte y gracia 
de un divino soplo ,
todo mi pecho encaje 
entre tus hombros 
y entre tus huecos 
yo deposite besos 
que forman pequeños mares 
en los que tú y yo nos fundimos ,
para que nadie pueda observar ,
como hora tras hora ,
no nos dejamos de mirar. 








 








  

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